Nos encontramos al sur de Granada, con casi 80 km de costa, a los pies de las sierras de La Contraviesa y Lújar, en la parte oriental y, las sierras de La Almijara y Cázulas en la occidental y la misma Sierra Nevada. Con más de 300 días de sol al año, suaves temperaturas en invierno y el frescor de la brisa del mar Mediterráneo en verano, nos ofrece una temperatura media anual de 20ºC, el abrigo que proporciona la Cordillera Bética, frenando los flujos de aire frío del norte, inducen las zonas de microclima que disfrutamos. De ahí su nombre, Costa Tropical. Éstas condiciones han permitido el desarrollo tanto agrícola, por el cultivo de subtropicales, como el turismo.

Almuñécar, ciudad milenaria. Núcleo relevante de la costa, su historia se remonta al siglo VIII a.C., colonizada por los fenicios, la llamaron Ex (Seks-Seksi), comerciantes de oriente y grandes navegantes, construyeron factorías de salazones de pescado en la costa andaluza, restos de una de ellas se conservan en Almuñécar, ésta industria del salazón, alcanzó importancia en la época. De la huella fenicio-púnica se conservan yacimientos en diversas zonas de la localidad (varias necrópolis, destaca por su importancia la de Puente de Noy).

Más tarde, con la llegada de los romanos a la península, sobre el año 218 a.C., pasó a llamarse Sexi Firmum Iulium (año 49 a.C), obteniendo la categoría de municipio romano. La actividad del salazón fue continuada y alcanzó su mayor esplendor en los siglos I y II d.C., el «garum» un paté de pescado era exportado a todo el imperio. En aquella época se construyó el importante Acueducto, una obra de ingeniería para dotar de agua a la ciudad, de unos 7 km de longitud con tramos que hoy día aún siguen activos, uno de los más destacados el de Torrecuevas, con 130 metros y 19 arcos.

Por el año 755, procedente de Damasco, desembarcó en nuestra costa el fundador del Emirato Independiente de Córdoba, el príncipe Omeya Abd-al-Rahman, los árabes le llamaron entonces al-Munakkar. Comenzaba un nuevo periodo de esplendor bajo la dominación islámica que duraría 8 siglos. Con la reunificación de los territorios de al-Andalus, se forma el Reino Nazarí de Granada, último reducto del Islam en España. Siendo la principal ciudad costera fue elegida por la dinastía nazarí como lugar de descanso. Se convirtió en una próspera medina alrededor del castillo árabe, poseía puerto, mezquita y mercados, producía pasas, caña de azúcar, frutas, sedas y además pesca.

En la actualidad, en las calles del casco antiguo, de gran riqueza arqueológica y patrimonial, se aprecian las huellas de más de 2.500 años de historia, que confieren a sus gentes un carácter amigable y acogedor.

En el museo de La Cueva de los Siete Palacios (origen romano) se pueden contemplar las joyas que dan testimonio de las huellas del pasado.

Playas y calas con encanto, acantilados, donde se practican deportes acuáticos, buceo, submarinismo; pesca submarina en entornos incomparables y de fama internacional, wind surf; kayak; vela; voleibol y fútbol sobre arena; parapente, senderismo, petanca, campeonatos de atletismo, kenpo, BMX . Otros deportes tienen especial relevancia, ciclismo; fútbol; con equipos internacionales que vienen a concentrarse y entrenan en la zona, de distintas disciplinas y completan el marco de un entorno incomparable donde la vida transcurre relajadamente.

Ofrece una amplia oferta cultural con actividades, conciertos, a destacar el anual en verano, Jazz en la Costa, Certamen Internacional de guitarra clásica Andrés Segovia, teatro y danza durante todo el año. Igualmente a nivel gastronómico con numerosos restaurantes y bares donde deleitarse con los sabores del sur, pescados de la zona y disfrute de las famosas tapas muy apreciadas.

Todo esto y más, completaran tus días en este pequeño paraíso del sur de España.

Ven a conocernos.